jueves, 10 de septiembre de 2015

¿Educamos para ser competitivos o para ser competentes?

Desde el ámbito educativo, es necesario precisar el norte al que se pretende conducir al alumno. Si se subraya el ‘competir’, se orientan las actividades educativas al entorno; es decir al éxito profesional, medido en términos de renta, lo que implica hacerse con un estatus y lo que aquel incluye. 

En cambio, si se enfatiza el ‘ser competente’, entonces se centran en la persona.

Implica educar a una “persona” que tiene que desarrollarse en un entorno en el que tiene que actuar, responder, discernir las posibilidades que le ofrece para convertirlas en disponibilidades Y hacerlo con decisión flexible y humana.

 El educar para ser competente apunta a la formalización de las facultades humanas: inteligencia, convicciones, autoestima y voluntad, para que deje su impronta en el ámbito en que le corresponda desenvolverse.


Usted elige que desea para sus hijos, ser competentes o ser competitivos, esta en sus manos la paz del mundo.